lunes, 24 de mayo de 2010

POBRE ARTURITO...! por David Adelson

(la consigna, elaborar un relato en el cual aparezcan al menos dos pecados capitales)


Su intensa palidez e inmovilidad, los ojos desorbitados y la respiración entrecortada por profundos gruñidos, se extendieron por largos minutos. Los colegas del ingeniero Shiffer lo observaban asombrados mientras él, rígido, miraba hacia la esquina de su jardín donde había impactado un bólido extraterrestre, con gran estruendo. Así concluía la prueba del teletransportador de materia a velocidad "warp 2" (el doble del de la luz), que consistió en enviar a la tierra un pequeño meteorito, a través de ese nuevo ingenio, desde las lejanías de Saturno. Salvo la falla en el punto de llegada, el resto del experimento, conducido por el piloto de pruebas, había sido un rotundo éxito. Las llamadas de felicitaciones se sucedían unas tras otras.

Schiffer había empezado a estimar al piloto luego de que éste pagara los daños a su jardín cuando el primer experimento y, más adelante, las roturas del mobiliario de su alcoba matrimonial –que casi provoca el divorcio conyugal- después de la prueba con la máquina del tiempo. Incluso, trabajaron bien al unísono en el último experimento. Pero ahora...
Sus recuerdos no se detuvieron sólo en la ocasión en que su dormitorio fue hecho papilla y casi desencadena la separación de Brenda, su mujer. Ahora, mientras observaba cómo el humo del impacto se disipaba de su jardín –y los perros del vecindario aún ladraban y aullaban de pánico- recordó otro momento en que casi llega el divorcio: cuando él impuso su criterio de que la mascota familiar debía ser un perro Basset Hound en vez del Dachshund (o perro salchicha), que procuraba su esposa. Logró conjurar la ruptura y adquirir su cachorro al que bautizó Arturito, en honor del personaje de una antiquísima película llamada La Guerra de las Galaxias. Eso le valió, entonces, soportar continuamente bromas ácidas de Brenda y todo tipo de críticas y pullas hacia el perro de orejas descomunales y ojos tristones. En realidad, ella –arquitecta de fama- siempre le demostró pesar ante sus logros y elecciones. Y cualquier evento, como el de la destrucción del dormitorio, disparaba sus terribles reacciones hormonales. ¿Qué haría ahora su mujer luego de este accidente en el jardín? ¿Cómo reaccionaría? ¿Con fiereza o con felicidad? Los técnicos, apenas producido el impacto, evaluaron que el meteorito enviado desde Saturno había atravesado limpiamente la atmósfera sin fragmentarse y penetrado la tierra, haciéndola temblar, deteniéndose a docientoscincuenta kilómetros de profundidad. Del agujero en el jardín emanaban vapores calientes, gases ácidos y olores a basalto, que afectaban la flora de toda la zona. Pero el piloto de pruebas, seguramente, volvería a remarcar que él era lo mejor de lo mejor que tenía la corporación Tecnotrónix. Por el momento, anunciaba su retorno al planeta añadiendo que enviaría un mensaje para Schiffer.
Los ayudantes del ingeniero, oscilaban su atención entre observarlo y trazar hipótesis sobre la trayectoria del bólido, que debió impactar en otras coordenadas. También, y según los datos de los sensores, advirtieron que el meteorito había caido sobre la cucha del perro y lo arrastró hasta las profundidades donde se detuvo. Ahi, podía observarse –debajo de su masa- una especie de alfombra con forma canina de la que sólo sobresalía una parte del rabo...En aquel momento, llegó el mensaje del piloto de pruebas para Schiffer. El cadete llegando a toda carrera lo transmitió: "Un gran abrazo ingeniero, en unos momentos solamente estoy con usted. Traigo en la nave un auténtico champagne francés...". El jefe del proyecto se movió lentamente. Palmeó suavemente al mensajero, con una leve sonrisa enigmática, y se dirigió con paso cansino pero seguro hacia su colección de armas antiguas. Allí guardaba, limpio y en condiciones de uso, un viejo pero bien aceitado Colt M-16.

2 comentarios:

A.R.N. dijo...

david. espero que el senior catrasca sobreviva y protagonice el proximo capitulo de esta saga proximamente. digo... para las nenas... no le podemos poner algo romantico?

David dijo...

Nos esforzaremos, nos esforzaremos (si sobrevive...).