domingo, 11 de marzo de 2012

Noche azul alma de olvido - por Nancy Echeverría Kuperman

Noche bañada de azul olvido, luna plateada reflejada; sonidos silentes, alma angustiada, vida truncada sin haber comprendido, busca retumbar sus sentidos aturdidos, percepción de haber sido, emociones ante lo desconocido; alma desposeída de cuerpo, sin poder expresar su dolor, tristeza, cólera, para llorarlas, gemirlas, bramarlas, ahogarlas, estrujarlas; penas de espíritu despojado, desgarrado aliento arrebatado, mil deseos de maldecir; ensangrado el cuerpo por el ser amado a quien prodigara sentimientos, emociones, compartiendo sensaciones; lacerada esencia, enloquecida aun después de haber fenecido, frustración, llevada va por vientos sin destino.
Cuerpo y mente distraídos, albergaron por un instante aquella alma perdida, aferrada al cuerpo exhalo un suspiro profundo mas incomunicados quedaron, alma, mente, cuerpo; fatal destino, no existe lenguaje, lengua, dialecto para tres incomprendidos a pesar de haber sido unidos.
Alma aferrada a un cuerpo desconocido, se incrustó en la mente, cuerpo que quiere abrazar y acariciar la esencia, el alma, que vierte lágrimas que al secar se convierten en arena tormenta de viento que va y en el grito del silencio evoca el nombre de aquel que amo y su vida segó; mente trastocada por consolarla, cuerpo exhausto de acariciarla, alma durmiente que al fin consumida de sufrir clama eternidad.
Quebrantado aquel que el amor guardo en silencio, querer de amanecer entre sus brazos, ilusiones de besos, es el amor no correspondido, amor contra el viento se volverá tormenta, sus razones calla, falto de esperanzas, ojos cansados, lágrimas que dejan huellas, sensación de larga ausencia, herido sin sangre, perdida la cordura se encontró diciendo: te necesito vida mía…toma mis brazos, mis manos… mis caricias, aunque luego morir sea en ti para buscarte en el infinito, entonces te diré… te amo…eternamente te amo.
Todos dirán no haberla conocido y el viento arena de lágrimas les embadurnara la cara musitando repetidamente su nombre.

Imagen: Sueño de una noche de luna- Laura Insfran

1 comentario:

Gaby dijo...

Un texto que transmite la angustia, la hace palpable.